1932
Para conseguir el éxito en la fabricación de electrodomésticos más potentes y ligeros, los ingenieros de Siemens distribuirían el lavado y centrifugado en dos máquinas. El resultado fue el “Power Washer”, la primera lavadora con un tambor de eje horizontal, una función de marcha atrás controlada electromecánicamente y un selector de calor, proporcionaba un trabajo completo y eficaz en todos los sentidos. Además, el ciclo de lavado fue seguido de la extracción de agua mediante un sistema de centrifugado aparte.
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